Desde que Piaget propuso sus etapas del desarrollo cognitivo, muchos se han preguntado si es posible acelerar el progreso por tales etapas. De manera más reciente, la pregunta ha pasado a la conveniencia de acelerar el aprendizaje de preescolares y niños pequeños que corren el riesgo de un fracaso académico. ¿Puede acelerar el aprendizaje? Y de ser así, ¿es conveniente hacerlo?
“Algunos de los argumentos más contundentes a favor de “acelerar” el desarrollo cognoscitivo se fundamentan en los resultados de estudios transculturales. Los resultados indican que ciertas habilidades cognoscitivas realmente están influidas por el ambiente y la educación. Dos de los más expresivos defensores de la formación académica temprana son Siegried y Therse Engelmann (1981)”
En primer lugar se debe ser consciente de que la aceleración del proceso de aprendizaje de un niño es un proceso individual y único, que depende de los caracteres subjetivos del propio niño. Cada una de sus peculiaridades psicológicas, capacidades mentales o motrices o su actitud hacia la materia concreta definen el rendimiento que el niño va a ofrecer en el proceso de adquisición de conocimientos.
En base a las lecturas que aquí tenemos, podemos afirmar que la aceleración en el aprendizaje si es viable, dependiendo de la materia, y que además se puede estimular al niño con el sistema de obtención de recompensas, para que este muestre mayor interés en el aprendizaje de materias.
“Los psicólogos piagetanos que intentan aplicar su teoría a la educación sostienen que el desarrollo no debe apresurarse, opinión tradicional de la que Wafsworth (1978).” La función del maestro no es acelerar el desarrollo del niño a la velocidad con que pasa de una etapa a otra. Su función es asegurar que el desarrollo en cada etapa se integre y complete cabalmente”.
No es recomendable o conveniente por distintas razones que exponemos:
· Debido a la multiplicidad de niños, existen multiplicidad de resultados durante el aprendizaje. Habrá niños que alcancen unos resultados más óptimos que otros, algunos que superen los objetivos marcados y otros que no.
· El niño que no alcance los resultados mínimos establecidos o bien que no obtenga el objetivo marcado, se le pueden crear distintas clases de traumas, depresiones o taras en su comportamiento. Además se puede generar un estrés que mantenga al niño en tensión por el fracaso continuado en el proceso.
Una de las razones por las que no estoy a favor de no acelerar el proceso de aprendizaje es la que mencionáis vosotros ‘’ Habrá niños que alcancen unos resultados más óptimos que otros, algunos que superen los objetivos marcados y otros que no.’’ Desde mi punto de vista es un completo error ya que si lo lleváramos a cabo ¿Qué pasaría con los niños que no son capaces de conseguir los objetivos marcados?
ResponderEliminarPosiblemente queden rezagados y no podamos volver a mantenerlos al nivel de clase.
María Díaz 1º de Primaria
Estoy totalmente de acuerdo con vosotros en la afirmación: 'Debido a la multiplicidad de niños, existen multiplicidad de resultados durante el aprendizaje.', puesto que las etapas de piaget son demasiado inflexibles a este respecto y se debe atender a las particularidades personales de cada alumn@ intentando adaptar el curriculo educativo a cada caso particular, a veces acelerando el proceso de aprendizaje un poco y otras retrasandolo un poco. También se pueden crear grupos de trabajo (solo en determinados momentos) en función de sus características cognitivas para ayudar a los niños que no se queden rezagados pero que tampoco retrasen a sus compañeros.
ResponderEliminarVANESSA RODRÍGUEZ (primaria)